El interior de la rosa
Mira en el interior
de esta Rosa.
Mira su imagen y su
delicadeza que a ti se
asemeja,
Mira su hermosura
y su hermosura
contempla su belleza.
Si la comparas
con el interior
de tu persona,
Nada es similar a
ti, mujer.
Ni el interior
de la citada rosa
semeja tu grandeza,
Y nada es
comparable con tu
bondad inmensa.
En los tiempos difíciles
cuando nos
encontramos solos,
En esta ciudad incierta
la soledad es triste y
aumenta la tristeza,
Y no están tus hijos como
si tal jilgueros
fueran,
Que con sus trinos
alegran la primavera.
Andamos como viejos
por el mundo con
pasos de torpeza,
Y contemplaos la
esperanza de estar juntos
hoy día,
Que para nosotros es,
nuestra mayor grandeza.
Y vernos coronados los dos
juntos con corona de
laureles.
Del laurel de los poetas.
Esteban Palomino
Rabadán